Las peleas entre hermanos son una constante en muchos hogares, pero no tienen por qué ser una fuente de estrés sin fin. En lugar de actuar como árbitro, puedes convertirte en su entrenador. Este artículo te ofrece herramientas prácticas de comunicación no violenta y un método paso a paso para la resolución de problemas que les enseñará a gestionar sus conflictos y a trabajar en equipo.